En los últimos tiempos, está muy de moda el concepto de cajas de ahorro en el trabajo. Si no has escuchado hablar sobre ellas, no te preocupes porque a lo largo de este post te vamos a ofrecer una aproximación al término así como su funcionamiento para que veas las ventajas que tienen por si en tu lugar de trabajo deciden llevar a cabo uno.
Definición de cajas de ahorro en el trabajo
Básicamente, se puede decir que una caja de ahorro en el trabajo se compone de las aportaciones que los propios trabajadores realizan, así que la empresa participa únicamente en la administración, vigilancia y observación del correcto funcionamiento de los préstamos y del ahorro de los empleados.
Su principal objetivo, por lo tanto, es reunir el ahorro de los trabajadores y, con ese ahorro, poder otorgar préstamos a quien requiera recursos de forma ágil y con una tasa de interés menor a la de los bancos o prestamistas.
Su funcionamiento
Para entender el funcionamiento de las cajas de ahorros en el trabajo, son varias las cosas que tendrías que tener en cuenta, entre ellas:
- Las reglas de aportaciones y préstamos están recogidas en los reglamentos o estatutos de cada caja de ahorro.
- Los préstamos pueden equivaler a uno, dos o tres meses de salario y a un interés bajo.
- La política de préstamos se establece en los estatutos y considera el límite de los mismos, así como la tasa de interés y forma de pago.
- La fecha de liquidación es indefinida y no necesariamente de un año.
- Cuando acabe el período acordado, los rendimientos obtenidos en la caja se reparten entre los asociados.
Como ves, son muchas las ventajas que ofrecen las cajas de ahorro en el trabajo y las facilidades que ofrecen a los trabajadores para conseguir dinero que, a través de una entidad financiera, tendría un tipo de interés mayor.
